Objetivo Plan Marco

Queremos anunciar, de modo renovado, la novedad transformadora de la Buena Noticia de Jesús a toda la comunidad educativa, desde el carisma vicenciano, como proyecto de vida personal y comunitario, y como un compromiso por la justicia y con los más pobres.




jueves, 20 de enero de 2011

Carta de Sor Evelyne Franc Superiora General de la Hijas de la Caridad

           COMPAGNIE
  DES FILLES DE LA CHARITÉ
  DE SAINT VINCENT DE PAUL
      140, RUE DU BAC
  75340 PARIS Cedex  07
  Tél :  33 149 54 78 78
  Fax : 33 149 54 78 19
  E-mail : secretairegene@cfdlc.org                                                                                                                                                                                                                         
                                                                               17 de enero de 2011

Queridas Hermanas,
¡Que la gracia y la paz de Nuestro Señor Jesucristo estén siempre con nosotras!
Haití, Túnez, Brasil…estos países han estado muy presentes estas últimas semanas en nuestros medios de comunicación y sin ninguna duda, se preguntarán  lo que  están viviendo allí nuestras Hermanas. En esta nueva carta de familia, comparto sencillamente las últimas informaciones que me han llegado.

Las Hermanas de Haití han celebrado el 12 de enero el primer aniversario del terremoto, con dolor y con esperanza, en comunión con toda la población. La víspera de ese día, los alumnos de la escuela Juan Pablo II (junto a la Casa Provincial), sus profesores y sus padres participaron en un encuentro conmemorativo, orando ante la tumba de Sor Brigitte, en presencia de la familia de nuestra Hermana. Esta escuela Juan Pablo II, en la que las clases tienen lugar actualmente bajo tiendas de campaña, se está reconstruyendo gracias a la valentía de las Hermanas, la generosidad activa de algunos empresarios y la ayuda procedente de la Compañía.  La obra de la nueva escuela, que será más espaciosa y sólida, es ya un signo de esperanza para todo el barrio. Los recientes mensajes de la Visitadora, Sor María Teresa Tapia, y de las Hermanas son muy conmovedores. Todas hacen una relectura de sus servicios a las víctimas del terremoto, a los enfermos de cólera, durante estos últimos doce meses, como una sucesión de llamadas del Señor, experiencias de su gracia y de la protección de la Virgen María; con agradecimiento evocan también el apoyo de la Compañía.

En Brasil, las inundaciones y corrientes de barro han afectado principalmente la región Serrana, en la Provincia de Río de Janeiro. La Visitadora, Sor Jeny Borges, me comunicó ayer que de las cinco casas situadas en esta región, la de Friburgo es la que más le preocupa. Es un gran establecimiento con varios pabellones para ancianos y adultos discapacitados, en total 250 personas muy dependientes; además muchos empleados, afectados ellos mismos por la catástrofe, no pueden acudir al trabajo. Las  Hermanas de la Provincia que deseaban apoyar a la Comunidad de Friburgo, no han podido llegar porque las carreteras permanecen por ahora intransitables. A Sor Jeny le he asegurado nuestra comunión de corazón y de oración.

En Túnez, uno de los tres países que comprende la Provincia de África del Norte, con Argelia y Mauritania, la situación sigue siendo muy caótica. Sor Françoise Petit, Consejera general, que estaba realizando su primera visita en este país tan querido para san Vicente, regresó ayer a Paris. Nos ha contado que el clima de tensión en Sfax y en la capital fue aumentando con el paso de las horas hasta la salida del Presidente y que después, los altercados y desórdenes han continuado. Sor Edwige Liferamary, la Visitadora, nos pide que recemos para que el cambio en la jefatura del Estado abra un período de paz y libertad en Túnez; nos confía también las dificultades encontradas por las Hermanas de Argelia y Mauritania.

Todas estas noticias de familia estarán presentes en nuestras oraciones durante la Semana de la Unidad que comienza mañana. Este año, la llamada a la unidad llega a las Iglesias del mundo entero desde Jerusalén; es una llamada a descubrir de nuevo los valores que constituían la unidad de la primera comunidad cristiana, cuando perseveraba en la enseñanza de los apóstoles y en la comunión fraterna, en la fracción del pan y en las oraciones (cf. Hechos 2, 42-47).

Sintámonos unidas llevando a la oración  las intenciones del mundo y más especialmente las de nuestros hermanos y hermanas que sufren en Haití, Brasil y en Túnez, sin olvidar los de Oriente Próximo, en su aspiración a la libertad, dignidad, justicia y paz.

Con afecto fraterno, en san Vicente y santa Luisa,

                                                                                                         
Sor Evelyne Franc
                                                                                                           Hija de la Caridad

1 comentario:

  1. Hola¡ Desde El Salvador todos los días le pido a nuestro señor Jesucristo que las bendiga, especialmente a las de Africa, un continentes donde todavía existe mucha injusticia, mucha pobreza, donde todavía necesitamos de la palabra de Cristo que solo puede ser expresada a través de la labor humanitaria de las Hijas de la Caridad.

    ResponderEliminar